IGnacio. IGnición. Berkeley

-Llamado a buscar perspectivas prefiero aquellas escenas que simplifiquen la vida, que encajen en mitologías preestablecidas; esta historia nace respondiendo a este espíritu que reduce la realidad a un punto de fuga definido, una gama de grises y a dos o tres sonidos.

-Encuadrar, enmarcar, buscar planos, prescindir de dimensiones, fotografiar un proceso:

-El espacio abierto de la plaza porticada desgasta baldosas y cuerpos, y condiciona su percepción; no así el espacio lineal de una calle estrecha, en la que el transeúnte vaga sin ideas pero con un destino; lo que vemos o sentimos se debe al espíritu que causa todo en todo

-¡Silencio!

-Desde aquí, los mendigos no son más que haces de percepciones, que la voz carraspeada modula y esconde: salivas y remiendos 

-Un hombre, IGnacio, se aprieta la aleta nasal, agacha la cabeza, y exhala brutalmente tres explosiones viscosas contra el suelo.

Un niño pisa solo las baldosas blancas del ajedrezado de la plaza, su sombra alargada requiebra la direccionalidad de las escaleras. Un cojo custodia su gorra vacía mientras fricciona insistentemente su pierna vencida. Pájaros no hay. No hace frío. No hay botellas recalentadas envueltas en papel de estraza. Una bolsa aletea blanca el vacío.

-Trazas de anafiloxis anafilaxia filoxera buscan una substancia real que sustente las propiedades de los cuerpos

-El conocimiento puede perfeccionarse eliminando todo pensamiento y quedándose con las percepciones puras

IGnacio fue condenado y quemado en la hoguera el día 25 de octubre de 2014 su delito: PENSAR (Final 1.) SENTIR (Final 2.)
No fue condenado (Final 3.)
(Táchese lo que no proceda. Dígase quién dijo qué.) 
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